El objetivo del gigante de los microchips es ofrecer a los usuarios de Ubuntu y Fedora una forma sencilla de mantener los controladores de sus tarjetas gráficas Intel al día, y de hecho la última versión de los mismos viene con mejoras que beneficiarán la experiencia de juego a través de Steam, entre otras.
Este nuevo instalador de Intel añadirá automáticamente un repositorio, por lo que las actualizaciones de los controladores se obtendrán conforme salgan. Sin duda, un movimiento de agradecer por parte de la compañía que esperamos que se abra a otras distribuciones.
Sin embargo, hay problemas que afectan especialmente a los usuarios de Ubuntu 64-bit, a los que se recomienda encarecidamente NO UTILIZAR EL INSTALADOR todavía bajo riesgo de “romper” el sistema. Es lo que recomiendan en WebUpd8 -cuyo autor ha hecho la prueba con resultados negativos- y lo mismo hacemos nosotros, extendiendo la recomendación a todos los usuarios que no se vean capacitados para arreglar un desaguisado de drivers y dependencias en su sistema.
A pesar de los problemas, comprensibles hasta cierto punto por lo temprano del lanzamiento, que a buen seguro mejorará en próximas actualizaciones, el gesto de Intel es bienvenido. A ver si toman ejemplo AMD y NVIDIA.
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